boceto de Versión L del edificio Puerto de Cartagena

Reforma del edificio comercial del Puerto de Cartagena

Análisis de necesidades de la reforma

 

A la hora de abordar el proyecto de reforma del edificio comercial del Puerto de Cartagena partimos tanto de los condicionantes del promotor como de los condicionantes que nos impusimos tras el análisis del edificio, de su relación con el entorno y de los usos que en él se desarrollaban.

Se trata de un edificio compartimentado en varios locales destinados a albergar actividades que tradicionalmente han sido de pubs, cafeterías o restauración. Nos encontramos con una falta de aprovechamiento de la edificación muy clara, que entendemos que entre otros condicionantes, estaba relacionada con el deterioro de algunos de sus elementos, así como con la falta de uniformidad estética e imagen poco atractiva.

Especialmente chocante nos resultó el desuso del local situado en la planta superior, que no había llegado a acondicionarse en ningún momento, a pesar de contar con unas terrazas con vistas envidiables que aumentan su valor indudablemente.

Además nos encontramos con deficiencias evidentes en la propia edificación que podemos resumir en las siguientes:

1.- Entrada sin relevancia.

La escalera de subida a la planta piso era difícil de localizar debido a su situación, dentro de un portal cerrado entre dos locales que apenas se vislumbraba por los toldos de las terrazas de los locales de planta baja.

2.- Instalaciones y acabados que necesitaban reparación.

Sobre todo en la planta piso, en desuso, estaban deterioradas las cubiertas, algunas zonas de forjado tenían humedades y las conducciones de agua y electricidad debían adecuarse según los usos que se puedan desarrollar en los locales vacíos en un futuro.

3.- La accesibilidad del edificio no estaba resuelta.

Existía un escalón en todas y cada una de las puertas de los locales, lo que suponía una clara limitación para los usuarios y un incumplimiento de la normativa vigente, que dejaba al descubierto la necesidad de actualización.

4.- Imagen poco cuidada.

Debido a la falta de una normalización estética, cada una de las actividades que se desarrollaban en los locales de la planta baja había colocado rótulos, mobiliario y otros elementos que daban una imagen poco clara del edificio, muy compartimentada y que le hacía perder relevancia como edificio en el conjunto visual del paseo marítimo, a pesar de su privilegiada situación.

5.- Detalles incompatibles con el cambio de imagen que queríamos lograr.

Como las balaustradas de la planta piso, que suponían un impedimento visual más para los futuros usuarios de las terrazas; las esquinas redondeadas en los voladizos del piso superior, que no casaban con las líneas rectas que buscábamos potenciar; las ménsulas bajo los voladizos, que eran innecesarias y serían una molestia para la solución constructiva que podíamos plantear; las carpinterías, que no proporcionan la iluminación natural que podrían proporcionar y no son las adecuadas para que la relación interior-exterior pudiera ser más evidente.

Por tanto, buscábamos soluciones que provocaran un cambio importante en el edificio, tanto en su aspecto como en su relación con el entorno y en la forma en la que se usaban los locales comerciales.

Y con esta intención planteamos un proyecto de reforma en el que se mantiene la construcción existente y se conseguirá el cambio pretendido sin grandes alardes arquitectónicos pero dando lugar a una renovación integral.

 

Más detalles de esta obra aquí.